Nací en Sevilla en 1971, donde he formado una familia con mi hija, nacida en Etiopía. Estudié Magisterio y Pedagogía. En la actualidad trabajo como maestra de primaria en el colegio “Príncipe de Asturias” en la barriada de Torreblanca, donde también vivo. Llevo en el mismo Centro 21 años, los 17 primeros como profesora de Religión.
Mi compromiso misionero está en mi parroquia Inmaculado Corazón de María, a la que estoy vinculada de forma activa desde hace 30 años. Durante 9 años formé parte del Equipo de la Cáritas Parroquial.
Actualmente preparo un grupo de niños y niñas que el próximo Mayo recibirán su Primera Comunión. Y acompaño a un grupo de jóvenes dentro de la Red de Jóvenes Solidarios de Entreculturas.
Presenta el Laicado MMBEl Laicado MMB está conformado por un grupo de cristianxs que se sienten identificados con el carisma de las Misioneras Mercedarias de Berriz y que viven esta vinculación en comunidades laicales. En nuestra vocación nos sentimos llamados a seguir la Espiritualidad de Margarita Maturana.
Conocí el Laicado MMB en la Etapa en la que estaba en Cáritas, a través de Ana Rosa, una religiosa MMB. Me invitó a participar en la Pascua Misionera de Bérriz (Vizcaya) y al Campo de Trabajo en Cortes de Baza (Granada). A raíz de estas experiencias decidí conocer mejor su carisma y me acerqué a su Comunidad en Sevilla.
¿Cómo son las reuniones, cuántas sois?Actualmente en Sevilla nuestra Comunidad laical la conformamos 10 personas. Nos reunimos una vez al mes en la Comunidad donde viven las HH MMB y donde compartimos lo que se ha vivido durante el mes, logros, dificultades. También reflexionando temas que se proporcionan desde la formación continuada, al igual que las Hermanas. Es un espacio de discernimiento y acompañamiento de grupo.
¿Cómo vivís esta vocación y qué realizáis?Viviendo la disponibilidad y la gratuidad en todo lo que se va presentado cada día, colaborando en algunas tareas liberadoras y/o compromiso eclesial, según la posibilidad de cada unx.
Con un estilo de vida no basado en un consumo superfluo, sin dejarnos influenciar por la sociedad y así poder compartir con los más desfavorecidos. Y con un espíritu liberador que nos permita discernir la realidad con una mirada crítica, evangélica.
Valoramos la existencia de la comunidad que nos apoya, refuerza y facilita el vivir cada día un poco más desde el Evangelio y desde Jesús.
¿Qué es o qué supone para ti ser laica comprometida? ¿Cómo tomas conciencia que estás viviendo tu vocación, dentro del carisma mercedario, como parte de la Iglesia de Sevilla?Nuestro carisma me alienta a vivir mi vida cotidiana como MISIÓN, sobre todo mi tarea educadora. El carisma mmb (liberador) es fundamental en mi tarea como educadora, me ayuda a estar en un proceso de escucha constante que me facilite la acogida de las diferencias. Diferencias no sólo en mis alumnxs, sino también en mis compañerxs.
La ESCUCHA es fundamental. Una escucha atenta, que en ocasiones solemos dejar a un lado por las prisas. Escucha que intento alimentar entre mis chicxs para entre todos tender puentes de diálogo en esas diferencias, no sólo culturales sino también religiosas. Intento tener una continua actitud de escucha a lo diferente e involucrarme en la vida de los demás, achicando así distancias.
También es importante como educadora y laica mmb la actitud de la ENTREGA y la SOLIDARIDAD. Actitudes que no se pueden meramente enseñar si no están enraizadas realmente en ti. Hay lo descubro en el grupo de chicxs, que acompaño desde la parroquia. Descubriendo con ellxs nuevos modelos de relación con Dios, con los demás y con nuestro barrio.
El CUARTO VOTO también es un eje importante en mi vida diaria, ya que anima a “entregarme en la misión”, en mi misión, con todas mis capacidades.
¿Y no me agota esto? Si, a veces mucho, pero es un cansancio lleno de sentido. Y como suele decir mi hija Bereket a su abuela, “a eso mamá le hace feliz”.
"Son cosas chiquitas.
No acaban con la pobreza,
no nos sacan del subdesarrollo,
no socializan los medios de producción
y de cambio,
no expropian las cuevas de Alí Babá.
Pero quizá desencadenen
la alegría de hacer,
y la traduzcan en actos.
Y al fin y al cabo,
actuar sobre la realidad
y cambiarla, aunque sea un poquito, es la única manera de probar
que la realidad es transformable"
Eduardo Galeano
En este día, queremos agradecer a Dios su llamada, su impulso, la fuerza e ilusión que puso en las HH que fueron enviadas al Congo para ANUNCIAR a Jesús y su proyecto del Reino. Un impulso misionero que en estos 50 años, lo ha sostenido el Espíritu, repartiendo sus dones de: sabiduría, fortaleza, alegría, desmesura, gratuidad, amor, fidelidad … Dones que hemos podido descubrir en tantas hermanas que han entregado y siguen entregando años de su vida o la vida entera, como la pequeña semilla que cae en la tierra, desde lo sencillo, lo escondido, sabiendo que Dios es el que llevara a la plenitud su obra y su Reino.
Celebrar los 50 años del inicio de una misión nos lleva a pensar en mucha vida, con toda su riqueza y no menos dificultades. Estos años han estado marcados por la guerra declarada o latente, la injusticia silenciada y permanente, los cambios que abren esperanzas que se van perdiendo por el camino… y de fondo como siempre, la lucha de las gentes, sobre todo de las mujeres encargadas de sostener y cuidar la vida de los más pequeños. Y junto a ellas, nuestras hermanas, educando, concientizando, sanando, acompañando… Abriéndose a las vocaciones africanas, centradas en la misión, impulsadas por un CUARTO VOTO siempre inspirador que impulsa a vivir con radicalidad, dando y gastando la vida por amor, como quería la M. Margarita para todas nosotras.
De ese camino, de sus ilusiones, búsquedas, sufrimientos y alegrías, hemos participado y recibido mucho esta Región y seguimos sintiéndonos muy unidas a las hermanas que hoy siguen intentando vivir este Carisma en una tierra tan necesitada de Liberación.
Dice un Proverbio del Congo que “Las huellas de las personas que caminaron juntas nunca se borran”.
Este es el deseo que late en nuestro corazón: agradecer al Señor lo vivido y compartido, su presencia en ese caminar y el deseo de que sigamos entretejiendo juntas el futuro, entre nosotras, como Instituto”.
Para conocer más nuestra misión en África PINCHA
Es enviada a formarse a Doruma, donde permanece durante doce años. En 2003, después de un año y medio en Bangado, es destinada a Dungu, donde se vuelca en el trabajo con las mujeres desplazadas a causa de la violencia que sufre la zona, muy rica en recursos minerales –especialmente oro y diamantes– y afectada por la presencia de numerosos grupos armados que acosaban severamente a la población. Entre estos, destacaba el Ejército de Resistencia del Señor (LRA) de Joseph Kony. En el año 2009, la propia Hna. Angélique Namaika tuvo que huir de la zona durante varios meses.
La revista Mundo Negro ha concedido el Premio a la Fraternidad 2013 a esta religiosa, por ser un símbolo del trabajo que la Iglesia desarrolla en uno de los rincones más conflictivos del continente africano, y junto a uno de los colectivos –el de los refugiados– que con más facilidad pasa al olvido de la opinión pública.
El Encuentro de Antropología y Misión se centra este año en el tema de los “Refugiados, voces para la esperanza”.
Comenzará el sábado a las 10:30 de la mañana con la Conferencia “Refugiados en África. Realidad, causas y consecuencias” a cargo de Pablo Funes, responsable de África de Entreculturas. Continuará con una mesa redonda en la que se expondrán cuatro miradas sobre el fenómeno.
Por la tarde, Ramón Arozarena hablará sobre “El silencio de los desplazados internos en la Región de los Grandes Lagos” y la jornada finalizará con el testimonio de la Hna. Angélique Namaika, religiosa agustina de la República Democrática del Congo que ha sido galardonada con el Premio Nansen 2013 que concede ACNUR por el trabajo a favor de los refugiados.
Noticia extraida de CONFER
Comunicado de Umoya-Federación de Comités de
Solidaridad con África Negra.
“¿Hasta cuándo las riquezas naturales del Congo seguirán siendo motivo de maldición para su pueblo?”
Desde hace varios meses, una nueva rebelión “liberadora” siembra la desolación entre los habitantes de la provincia congoleña del Kivu-Norte, cuya capital es Goma. Se trata del Movimiento 23 de marzo (M23), creado por militares que ya anteriormente habían participado en una rebelión (CNDP) y que en 2009, como consecuencia de un acuerdo, se integraron en el ejército oficial congoleño. Esta rebelión, según ellos, está motivada porque Kinshasa no ha cumplido lo firmado.
El apoyo de Uganda y sobre todo Ruanda a estos rebeldes, tanto a nivel de organización político–estratégica como en la misma formación militar, está documentado por diversos informes concordantes entre ellos. El más significativo, redactado por un grupo de expertos de la ONU, establecía que Uganda y Ruanda estaban apoyando logísticamente con armas y municiones, y con hombres la pretendida rebelión “liberadora”. Según este informe, la cadena de mando del M23 se remontaría hasta el ministro de Defensa ruandés, general James Kabarebe. Estas acusaciones, rechazadas airadamente por Ruanda, han derivado en reuniones del Comité sancionador de la ONU y en la congelación por parte de varios países de los fondos de ayuda a Ruanda.
Sin embargo, la llamada “comunidad internacional”, influida por los padrinos del régimen genocida de Paul Kagame, -Gran Bretaña y EEUU-, no termina de decidirse a condenar severamente a las autoridades ruandesas y evita citarlas como máximas responsables del desastre. Solo algunos oficiales del M23, como Bosco Ntaganda o el coronel Makenga, aparecen en la lista de perseguibles y sancionables, cerrando los ojos ante la implicación ruandesa en la agresión y en el expolio de la región, ahora en guerra abierta.
Los últimos acontecimientos revelan que se ha alcanzado un punto de no retorno. Goma ha caído; el ejército congoleño, humillado, ha huido; la comunidad internacional ha sido desafiada. La muerte, los saqueos, las violaciones, el reclutamiento de niños soldados, la huida y desplazamiento de poblaciones, vuelven a convertirse en realidad cotidiana. La ofensiva sobre Goma, programada y ejecutada concienzudamente, puede extenderse hacia el norte (Beni–Butembo) y hacia el sur (Bukavu). Un portavoz de los rebeldes ha declarado: “El viaje para liberar el Congo no ha hecho más que empezar (…) Vamos a Bukavu y luego a Kinshasa, ¿estáis preparados para uniros a nosotros?”
No pocos congoleños expatriados acusan al presidente Kabila de mantener conscientemente la debilidad de las Fuerzas Armadas Congoleñas para facilitar y hasta justificar la progresiva anexión del este del Congo a Ruanda. Se apoyan en que mientras Goma caía en manos de los rebeldes del M23, el presidente Kabila volaba a Kampala para reunirse con el presidente ruandés, Kagame, convocados por el ugandés Museveni, revestido repentinamente de mediador.
Entre tanto, la misión de la ONU, la MONUSCO, tiene desplegados unos 17.000 soldados en el Congo, de los que 7.000 se encuentran en el convulso este y, a pesar de disponer de abundantes medios, ha sido incapaz de cumplir su misión de proteger a la población civil y frenar a los rebeldes. Laurent Fabius, ministro francés de exteriores se ha preguntado si la MONUSCO no ha
fracasado en su misión “ya que es absurdo que los cascos azules no se hayan batido para impedir que unos centenares de rebeldes se hagan con el control de Goma”. No cabe la menor duda de que lo que ocurre en el Este del Congo es también responsabilidad de la comunidad internacional.
La captura de Goma por el M23 es una afrenta sin precedentes para el estado de derecho internacional y para la misión de paz más grande y más cara de las Naciones Unidas e intensifica una crisis humanitaria que ya era alarmante. ¿Hasta cuándo? ¿Hasta cuándo las riquezas naturales del Congo seguirán siendo motivo de maldición para su pueblo? ¿Hasta cuándo las llamadas grandes potencias callarán el genocidio más grande de África y quizás de la humanidad? ¿Hasta cuándo los congoleños deberán derramar su sangre por haber nacido en esta zona del planeta? ¿No son suficientes los casi 8 millones de víctimas, la mayoría civiles, que se han producido desde 1994 en las interminables guerras del Congo?
Madrid, 26 de noviembre de 2012
Umoya-Federación de Comités de Solidaridad con África Negra
Esta Red extendida por toda Europa quiere ser un PUENTE ENTRE ÁFRICA Y EUROPA, y promueve la JUSTICIA ECONOMICA entre Europa y África de tal manera que la población de África pueda aspirar a un futuro mejor.
El tema elegido para esta celebración es: “AEFJN- RESPONDE CON ESPERANZA Y URGENCIA COMO AGENTES DE TRANSFORMACION”.
Se han fijado ya algunas fechas:
Las diferentes Antenas celebrarán el aniversario en sus países, en fechas diferentes y según su organización.
Las Antenas, es decir, los grupos que pertenecemos a la Red AEFJN en los diferentes países, estamos llevando a cabo un trabajo de difusión de los temas que en la actualidad estamos trabajando. Así en la Antena de Madrid, nos dividimos en tres grupos de trabajo:
Los aspectos más destacados que planteamos en nuestros folletos son los siguientes:
Aunque parezca mentira Mineva, Rosvia, Leodi, Sandra y Denia acaban este año tan intenso en la formación MMB. Las hermanas que están en esta última etapa de la formación inicial, luego siempre nos queda la formación contínua, volverán a sus respectivas Regiones.
El día de clausura “oficial” será el sábado, 23 de junio. El grupo tendrá una ceremonia especial ellas juntas y por la tarde, las Vísperas de Clausura con
las comunidades de Bérriz.
Todas la familia MMB nos unimos a su agradecimieto a Dios por este año de gracia!
Con mucha ilusión os presentamos nuestra nueva web. Quiere seguir siendo una web de referencia en contenidos litúrgicos y de pastoral. Pero con una imagen más "atractiva" y con un manejo más sencillo
Tras 10 años con nuestra antigua web tocaba renovarse. Ahora continuamos en esta nueva etapa con igual entusiasmo, dinamismo y ganas de compartir lo mejor que tenemos y sabemos
Como véis también tiene, en la nueva web, gran relevancia el apartado de noticias. Esperamos que os podamos "enganchar" también a ellas.
GRACIAS por estar ahí.